
“Nosotros escuchamos una balacera en una calle más arriba, al parecer estaban disparando al aire. Nosotros estábamos en la habitación y la niña dijo “mami me dieron”, indicó.
Carlos Ambiorix Díaz, dijo que su hija Karla Rachel, estaba sentada en su cama cuando alrededor de las 10:30 de la noche se escucharon disparos cerca de su casa y una de las balas penetró en el techo de zinc de la vivienda, provocándole a la menor una herida en la cabeza que necesitó tres puntos.
Explicó que fue entonces cuando comenzaron a buscar en su cuerpo qué era, y vio que la niña tenía el cuello lleno de sangre.
“Mi esposa me dijo que le dieron un tiro a la niña, en principio no lo podía creer pero cuando fui y la vi estaba llena de sangre”, narró Díaz.
Expresó que de inmediato llevaron a Karla al hospital local, donde le curaron la herida, que milagrosamente no penetró la cabeza, sino que aparentemente rosó el cráneo.
Los padres de Karla buscaron en la habitación y evidentemente encontraron una bala encima de la cama y un agujero en el techo.
La bala fue entregada a miembros del departamento de Homicidios de la Policía Nacional, quienes iniciaron una investigación.
hoy.com.do
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