SANTO DOMINGO.- Quizá sea demasiado prematuro para sonreír frente a los resultados de las encuestas electorales, pero la publicada este lunes en la noche por Penn, Shoen & Berland y el Grupo SIN ofrece pistas interesantes sobre las posibilidades de cuatro de las principales figuras políticas nacionales.
El resurgimiento de Leonel Fernández, quien a finales de 2012 y casi hasta mediados de 2013 se encontró en sus cotas más bajas, informa de que sus contrincantes internos por la candidatura presidencial del Partido de la Liberación Dominicana no son percibidos por la población con posibilidades ciertas. Entonces, se estarían diciendo los votantes, a falta de pan, casabe.
Pero en lo que respecta a los tres dirigentes del Partido Revolucionario Dominicano –Miguel Vargas Maldonado, Hipólito Mejía y Luis Abinader— con aspiraciones de encabezar la boleta, sea blanca o convergente, las cosas son mucho más nítidas: el presidente del PRD “institucional” es quien menos cala en el favor de los votantes, pese a su dominio de la organización, sus irrenunciables expectativas presidenciales y su cada vez más derechista discurso político.
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