Por Guillermo del Palacio
Es habitual que las primeras partidas se tornen en un continuo sinsabor. Prepárate.
Para apuntar con precisión lo mejor es experimentar con las sensibilidades de movimiento de la mirilla.
Hay que morir tanto como sea posible y aprender los puntos importantes de cada mapa, las intersecciones clave y sentir el ritmo de la partida.
Las armas dependen del estilo. ¿Combate cercano? Escopeta. ¿El miedo te atenaza? Rifle de francotirador. ¿Poca puntería? Ametralladora pesada.
Enrique 'xPeke' Cedeño, de Origen. Campeón de LoL 2011
'Last hittear' es más importante que matar a alguien. No te suicides por matar a una persona si puedes matar 15 bichos; es más rentable.
Héctor 'TheFallen' Fuentes, de Samsung Gaming eSports. Hearthstone
Si juegas poco, céntrate en pocas barajas (cuatro como máximo) y domínalas.
Juega con las cartas de tu rival: tu estrategia ha de estar adaptada a su baraja.
Es importante conocer las barajas de moda y jugar con las que te sientas cómodo: si tu estilo es agresivo, escoge Cazador y Druida. Si prefieres el control, Sacerdote y Pícaro.
Observa 'streams' de buenos jugadores y torneos internacionales para mejorar.
'Herzex' Ramos. Bicampeón mundial de FIFA
El Real Madrid es el mejor equipo, ya que tiene al mejor jugador, Cristiano Ronaldo. En segunda línea vienen Chelsea y Bayern.
La clave para ser mejor es la defensa. Lo que hago es llamar al segundo jugador con R1/RB para que vaya a presionar al que está en posesión del balón, mientras que con el jugador que tengo seleccionado intento tapar las líneas de pase más peligrosas.
Rafael Tourón, experto en Gran Turismo y participante en GT Academy 2014
En las vueltas rápidas hay que tener memorizado el circuito y las trazadas; debemos tener todos nuestros movimientos automatizados durante toda una vuelta. En una carrera, lo importante es gestionar los recursos.
Las frenadas deben ser en el punto exacto y siempre pisando el pedal a fondo para soltarlo progresivamente cuando las ruedas empiezan a girar en dirección a la curva.
Tu posición de conducción debe ser siempre la misma; moverte 20 centímetros hacia delante o atrás puede hacerte perder las referencias de los puntos exactos.
Cuando conduces, tu vista tiene que estar a 100 metros del capó del coche; el resto, tienes que visualizarlo o intuirlo. En zonas lentas, a 30 metros; en rápidas, a 100-200 m.
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