Se inspiró en un canto a la dominicanidad, movitación que le sirvió de "leit motiv" para presentar no solo su repertorio del presente y del pasado, sino también para transitar por diferentes géneros musicales e interacturar en escena con los invitados especiales que esta vez subieron al escenario a cantar con ella.
El primero fue Joseíto Mateo, quien estuvo en la primera parte, apoyando a la Marcel con sus emblemáticos merengues, pero también desfilaron por allí, de igual manera el merenguero July Mateo, Rasputín, el salsero Israel, la Doncella del Acordeón, el grupo de exponentes urbanos RT, y la producción coreográfica de Aida Guzmán y su grupo de danza.
Sin embargo, la sorpresa de la noche, fue la reaparición de Sandy, quien hacía pareja con Papo, del dueto Sandy & Papo en los años 90's.
El público disfrutó al máximo su exitoso repertorio, acopañado de las bailarinas de Aida, confiriéndole al espectáculo la ligereza y diversidad que se procuraba.
Marcel llegó al escenario con un vestido que llevaba los colores de la bandera dominicana, y de inmediato procedió a realizar un popurrí de merengues clásicos, de varias épocas, como fue el caso de La hamaquita, En dónde estás corazón, y La agarradera.
Aparte del salsero Israel, que estuvo en el espectáculo, Marcel dedicó una parte del mismo a homenajear a Celia Cruz interpretando "Yo viviré" y "Carnaval".
El acompañamiento musical estuvo a cargo de una orquesta dirigida por Willi Olivero, integrada por músicos muy profesionales, que sobresalieron en el trabajo que hicieron.
Eso trajo inconvenientes en la primera parte del show, y uno de los más afectados fue Joseíto Mateo, quien sin embargo con todo y los problemas del sonido, fue aplaudido ampliamente por el público en reconocimiento a su amplia trayectoria.
El problema se subsanó tras la llegada del sonidista oficial que se contrató para la presentación.
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