
La familia de Henry “Kinki” Rosario, de 31 años, decidió honrar su deseo y lo velaron de esta peculiar manera.
“Él siempre decía que en el momento que muriera, quería que lo despidiéramos con música, bebida y juegos, porque toda la vida lo que hizo fue jugar”, dijo Henry Rosario, su padre, al indicar que su hijo era fanático de los gallos, cartas y todo lo que tuviera que ver con apuestas.

De igual forma, el hermano del difunto lo recordó por haber propulsado su carrera como artística del género urbano. “Kinki” murió de un infarto el pasado martes.
Fuente: Telemundo47.com
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